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Un impuesto que incentiva al gasto operacional y que reduce mi personal

Con la medida adoptada por el país de cambiar a un impuesto único de un 10% en el pago del dividendo o participación declarada como ganancia de la empresa a sus accionistas las empresas se están viendo obligadas a que después de pagar un 29% de impuesto sobre la renta de sus utilidades tengan posteriormente que pagar por esas mismas ganancias un 10% adicional por la declaración de la ganancia declarada o asignada a cada accionista. Lo que resulta ser contraproducente debido a que esto va a provocar que las empresas asignen las ganancias a sus accionistas como un salario e incrementen sus gastos de representaciones, debido a que a los accionistas les resulta más favorable ser castigado por un 25% de impuesto sobre la renta que es el máximo impuestos que a una persona física se le puede retener; pero esto también tendría sus consecuencias.

Aumentar el gasto como medida de reducción en el pago de impuestos a nivel financiero
Las implicaciones financieras a razón de que la rentabilidad expresada en los resultados operativos de las empresas serán muy bajos por el aumento de los gastos, eso es eminente y a la vez sería preocupante debido a que los activos de una empresa no están respaldados solamente por su estructura de capital; sino también por sus pasivos que en ocasiones resultan tener una mayor participación y una baja rentabilidad puede llegar a afectar el flujo de caja a un nivel de que la liquidez de la empresa no pueda cumplir en un periodo adecuado con sus suplidores y con las instituciones de financiamiento que compongan sus pasivos.

Aumento de la tasa de desempleo
Una vez los accionistas vean reducir su rentabilidad para mantener su nuevo estilo de vida, adquirir nuevos activos para el cumplimiento de las operaciones del negocio y en adición a esto cumplir con la nueva presión fiscal que pesa sobre una empresa directa e indirectamente, las empresas no apelaran a revisar los puestos y reducir al mínimo posible a sus empleados, provocando nuevos problemas que van a impactar a la economía de muchas familias dominicanas.

Considero que el estado dominicano esta aun a tiempo de incentivar a la inversión, reducir la tasa de desempleo y de crear a futuro un modelo económico más simple y que considere los diferentes tipos de negocios que existen en la República Dominicana para que el peso impositivo que tengan realmente sea el que pueda ese mercado soportar.

Por Harold Méndez

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