La llegada de la esperada Semana Mayor o Semana Santa está a la vuelta de la esquina y aunque por definición es un tiempo de meditación y oración, muchos aprovechan recrearse junto a sus familiares y seres queridos. A continuación compartimos algunas recomendaciones para aquellos que quieren aprovechar estos días y no dejar en “cero” sus cuentas bancarias.
¿Vacacionar o descansar? ¿Quedarme en casa o salir de la ciudad? Todas las opciones son válidas, solo debes asegurarte de tomar las decisiones en función de lo que realmente llena tu corazón, lo que te haga feliz y lo que tu bolsillo te permita.
- Planifícate, haz un presupuesto. Puedes hacer mucho sin gastar de más.
- Es importante que se planifique hasta el más mínimo detalle, de esta forma garantizarás pasar una semana santa feliz y así evitas dolores de cabeza por cuentas que no sabes cómo pagar. Te sugerimos incluir en el presupuesto los peajes, sobre todo si vas a Samaná o a la zona Este, así como las comidas -almuerzo, cenas y picaderas-, actividades extras -paseos en barco, alquiler de bicicletas o actividades en la playa-, vestuario -en caso de que necesites trajes de baño, toallas, etc-, medicamentos -un kit de medicina, si no lo tienes te puede sacar de apuros- y por último, no olvides presupuestar las bebidas -refrescos, cervezas, vino, jugos-, en fin… lo importante es que sepas con anticipación cuánto es que puedes gastar en los días de asueto y cuál es el límite que te vas a asignar para la diversión de último minuto.
- Los meses de interés son pagos diferidos, no descuentos
- Ten mucho ojo con las formas de pago. Pagar en plazos no es un descuento, al contrario, es probable que estés pagando mucho más por pagar en varias cuotas. Lo que realmente te conviene es ahorrar poco a poco semanas y meses antes de las vacaciones de semana santa y pagar de contado.
- Cuida tus documentos personales, tarjetas de crédito, débito, efectivo, así como las llaves de tu vehículo
- Cuida, de manera especial, tus tarjetas de crédito, ya que hay muchas personas en la calle durante estos días, momento aprovechado por desaprensivos para realizar robos y fraudes. No pierdas de vista tus pertenencias nunca. Si vas a hacer pagos con tarjetas, asegúrate de tenerla a la vista en todo momento.
- Utiliza tarjetas de débito; con esta puedes hacer pagos igual que con una tarjeta de crédito, además de que te aseguras de no usar más del monto que tienes presupuestado.
- Tampoco es recomendable tener mucho dinero en efectivo en los bolsillos. Ten en cuenta que a través de tu tarjeta de débito puedes retirar de los cajeros automáticos en el momento que lo dispongas y evitar el riesgo de andar con dinero encima.
- Incluye en tu presupuesto los gastos de mantenimiento de tu vehículo
- Si ya estás presupuestando todo, tu vehículo no debe ser la excepción. Incluye en mantenimiento preventivo antes de salir a la carretera: revisión de frenos, gomas, aceites, agua, entre otros. Es mejor prevenir que luego sorprendernos con que “el carro nos dio un palo” y se nos disparó todo el presupuesto. Siempre es mejor prevenir que lamentar.
- Haz un “Checklist” de lo necesario para el viaje. Comprarlo antes de salir te puede ahorrar hasta un 20%
- Si ya tienes un plan para salir de la casa, no dejes todo para el último minuto. Puede sonar a “cliché”, pero es algo que pasa muy frecuente. Haz una lista de todo lo que debes comprar, ya que hay cosas que se quedan para el final y terminas pagando más de lo debido. Un ejemplo de ello, son los protectores solares, que si los compras en tiendas de conveniencia, ubicados en zonas turísticas, seguro terminarás pagando un 20% adicional.
- Quedarte y disfrutar
- Una opción válida y buena también puede ser quedarte en casa. Aprovechar estos días para reflexionar, poner en orden tus ideas, organizar tu closet, gavetas, leer, descansar y encontrarte con tu “yo”; ese que diariamente nos pide a gritos unas horas para recargar pilas mentales.
Pamela Pichardo J
@pamelapichardoj
Coach y Conferencista Financiera
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